Cuando comenzamos en 2005 jamás pensamos que llegaríamos tan lejos, el ministerio nos ha llevado a conocer cerca de 20 países y a trabajar en una treintena de producciones estrechamente relacionadas con el amor al prójimo y la justicia social.
En el camino, hemos visto la injusticia cometida con el pueblo saharaui, pero también el rostro de felicidad de sus niños, que viajan a casa de familias españolas dentro del programa “Vacaciones en paz”, para recibir tratamientos médicos, alimentación equilibrada y una convivencia inolvidable. Hemos contemplado la destrozada Liberia tras 14 años de guerra civil y nos hemos emocionado documentando la llegada del “Africa Mercy”, un buque hospital con más de 400 voluntarios que se acerca para llevar gratuitamente salud y esperanza. Hemos caminado por los distritos rojos de prostitución en Bangkok, y nos ha roto el corazón la transformadora historia de Sophia, una joven tailandesa que rescata y acoge a jóvenes víctimas de trata. Hemos palpado en India, Kenia y Tanzania el sufrimiento de niños condenados por la miseria, y la maravillosa respuestas de Compassion, una organización que libera niños de la pobreza, ofreciéndoles formación, tratamientos médicos, ropa, comida y esperanza. Hemos vivido la caída, desabastecimiento e inseguridad de un país amado, Venezuela, y el privilegio de participar del envío de medicamentos, alimentos y acogimiento de venezolanos que huyen con tristeza y dolor de su país.
“En la carretera” agrupa 40 cortos audiovisuales de conciertos, entrevistas, reportajes, y viajes. 31 canciones, algunas inéditas, otras extraídas de recopilatorios y colaboraciones y otras de bandas anteriores a dtproject que se hacen necesarias para comprender todo el proceso hasta llegar aquí.
No ha sido fácil, llevamos más de una década en la carretera trabajando contra corriente. La familia ha crecido y hoy somos cientos de voluntarios a nivel nacional e internacional los que participamos de forma habitual en esta plataforma, luchando por cambiar mentalidades, por crear hábitos, por diversificar recursos, por repartir nuestro tiempo, por regalar esperanza. Iniciativas que teniendo en cuenta al prójimo, mejoren la vida de las personas que nos rodean y que dignifiquen las de aquellos que viven en lugares de explotación, persecución y pobreza.